De alguna forma el bebé no puede ser llamado eternamente 'el bebé', necesita un nombre que lo identifique, Miguel me había comentado en alguna ocasión que si era niño le pondría Arturo, así que hoy empezamos a llamarlo Arturito, no es definitivo, sin embargo va tomando forma su personalidad, deja de ser 'el bebé' un sujeto sin forma.
Ahora bien, también me gusta el nombre de Arturo, no sólo porque así se llama mi hermano y también fue el nombre de uno de mis primos más queridos, sino porque tiene personalidad, es un nombre fuerte, es nombre de Rey.
Por lo que comparto un breve resúmen de la Leyenda del Rey Arturo. 
Como mito el Rey Arturo se ha vuelto sinónimo de inteligencia, honor y lealtad; su espada (Excalibur), un símbolo del poder legítimo; su capital, Camelot, un lugar idílico de igualdad, justicia y paz.
El hecho de que Arturo y sus caballeros se reuniesen en torno a una Mesa Redonda, parece indicar que Arturo fue, conforme a la expresión latina, un primus inter pares, que significa 'primero entre iguales'.
La leyenda de Arturo
El Rey Uther e Ygraine entregaron a Arturo al Mago Merlín nada más nacer quien a su vez lo entrega a sir Héctor para que lo cuide y lo críe como su propio hijo.
A los 16 años, Arturo va con su padrastro y el hijo de éste a Londres, donde caballeros de toda Inglaterra intentan sacar una espada enclavada en un yunque que a la vez se encontraba prisionero en un trozo de mármol. La leyenda cuenta que quien la liberase sería el rey de Inglaterra y el encargado de unificar todos los reinos de la isla. Infructuosamente, todos los caballeros intentaron extraer la espada, pero es Arturo, sin ser caballero aún, quien logra liberarla, y le es revelada su verdadera identidad. Con la resistencia de todos los presentes, es proclamado rey, sin embargo, poco a poco todos lo aceptan y Arturo jura impartir justicia a todos los hombres de Inglaterra sin tener en cuenta su posición social.
Creo que yo sería entonces Madam Mim?, jeje.