Nelly nos cuenta que desde que llegó Arturito estaba llorando y que así se la paso durante toda la visita, no hubo poder humano que le hiciera callar, despertó a sus vecinitas de cunero y las contagió con el llanto.
Arturito va dando muestras de un carácter fuerte, tal vez sintió la llegada de su mamá y como ayer probó los brazos de papá hoy quería que mami lo cargara, sin embargo lo trasladaron a una incubadora cerrada donde sólo caben los brazos para poder acariciarlo y no les permitieron abrirla para poder estar con él, mi nuera tuvo que conformarse con hablarle y tratar con palabras dulces de calmar su llanto, sin embargo fue en balde y al retirarse tuvo que dejarle llorando.
Finalmente el parte médico dice que le aumentarán la dosis de fórmula que le dan, parece que ya se queda con hambre y aumentó treinta gramos de peso...